La movilidad reducida y las mayores necesidades de cuidados requieren la capacidad de comunicarse dentro del hogar con un mínimo esfuerzo. Tareas como pedir ayuda y abrir la puerta son importantes y deben ser fáciles de realizar.
Los teléfonos inteligentes se pueden utilizar dentro del hogar para comunicarse mediante voz, video o texto.
La comunicación por video puede ser útil en circunstancias en las que la persona discapacitada necesita ver una habitación o área de la casa a la que no puede acceder por sí sola. El asistente puede usar la cámara de su propio teléfono para mirar alrededor en nombre de la otra persona.
La comunicación por texto puede ser útil cuando la necesidad de la persona no es urgente y se puede abordar cuando el asistente tiene un momento libre.
Los timbres de llamada son una herramienta sencilla y asequible para la comunicación en el hogar. Muchos timbres de llamada se venden con varios transmisores y receptores. Los receptores deben colocarse en zonas donde los cuidadores puedan escucharlos fácilmente, mientras que los transmisores deben colocarse al alcance de la persona que los necesita. Es mejor tener uno que esté siempre con la persona, mientras que otros se pueden mantener en lugares fijos, como la cabecera de la cama o cerca del inodoro.
Los timbres de llamada varían en costo y complejidad; algunos tienen alertas audibles cuando las baterías están bajas, tonos de llamada distintos según el botón del transmisor que se presionó y otras funciones útiles. Estas funciones deben buscarse cuando sea posible.
Los timbres de llamada deben probarse periódicamente y sus baterías deben reemplazarse cada pocos meses.
Abrir la puerta de entrada de una casa puede ser difícil para una persona con problemas de movilidad. Se puede informar a los amigos, familiares y visitantes habituales sobre la imposibilidad de abrir la puerta y de simplemente tocar y entrar. Los repartidores, vendedores ambulantes y otras personas se beneficiarían de la presencia de un altavoz colocado en el exterior para poder decirles que entren o recibir otras instrucciones.